Muchos peregrinos quisieron ver al Papa para contarle situaciones difíciles y pedirle ayuda. Como esta pareja a la que dio una bendición especial.
Esta semana, Francisco su catequesis sobre la oración, y explicó que es normal encontrar tres dificultades: las distracciones, la aridez y la pereza.
FRANCISCO
“La distracción es la imaginación que da vueltas y vueltas. Santa Teresa decía que esta imaginación que da vueltas en la oración es “la loca de la casa”. Es como una loca que te hace dar vueltas y vueltas… Hay que detener (esta distracción) y meterla en la jaula de la atención”.
La aridez llega cuando cuesta mucho mantener pensamientos, recuerdos y sentimientos espirituales. El Papa dijo que hay que tener cuidado para que esta pesadez no se contagie al corazón.
FRANCISCO
“No se puede rezar y no se puede sentir consuelo con el corazón gris. No se puede afrontar la aridez espiritual con el corazón gris. El corazón debe estar abierto, luminoso, para que entre la luz del Señor. Y si no entra, espéralo con esperanza, pero no te encierres en ese gris”.
La última dificultad tiene que ver con el pecado capital de la pereza, que se vence con la perseverancia.
FRANCISCO
“El verdadero progreso en la vida espiritual no consiste en multiplicar éxtasis, sino en ser capaz de perseverar en los momentos difíciles. Camina, camina, camina, y si te cansas, párate un rato y luego vuelve a caminar, pero con perseverancia”.
El Papa antes de marcharse no renunció a saludar a muchas personas.
Este niño le entregó una carta porque hará la comunión en el fin de semana.
Otros le trajeron regalos…
Y esta incluso le dio una bendición.